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domingo, 31 de octubre de 2021

Soy un demonio reflexivo, esperando al  momento de la venganza pero esta se diluye en las  sombras.  Entre luces y tinieblas, de la tristeza paso a la ira, encendida por el dolor que se cruza en mi camino. Y sin embargo, cuando medito y me repliego, soy como un niño arrebatado por el desconcierto. ¿Acaso un demonio, no es una parte ángel caido, a la búsqueda de su propia libertad? Tanta pena, tanto tormento me encadena en esta aflicción y ese demonio que llevo dentro, solo desea que se acabe todo para descansar entre la oscuridad y la luz.

 

miércoles, 19 de mayo de 2021


 

El niño llora con el niño que lleva dentro. Y el hijo llora al padre que nunca se fue en sus recuerdos. Ese pequeño lucha contra sus propias sombras para restituir el amor pero la pena es tan inmensa que llora a solas tanta ausencia. El dolor lo hace fuerte pero hay días muy sombríos, sumidos en su propia y tierna soledad. Ese niño ha madurado a base de golpes, en medio de la adversidad y se ha hecho mayor y pese a todo, sigue estando ahí, conjurando solo palabras que muevan el consuelo de sentirse vivo.

martes, 11 de mayo de 2021


 

Ahora el hijo se ha convertido en padre, hermano mayor y tío. Y asumo ese papel pues es la querencia que el destino me ha otorgado. Por encima de todo lo demás, seré lo que esta vida plena quiera darme pues no hay mayor regalo que recibir ese don. La vida te quita pero te concede y te da la fuerza más vibrante que mueve nuestra existencia, el amor verdadero.

viernes, 5 de marzo de 2021




La vida no es un camino de rosas, lo sé. Unas veces te pinchan sus espinas y otras te embelesan sus colores pero se marchitan. Y a pesar de todo, incluso en su cenit, hay una belleza, un sustrato de la muerte que genera otra vida. Debemos seguir el camino despejado, con la mente despierta y altiva, desfilando hacia el horizonte, entre hojas secas pues la vida sigue en suspensión. Amate a ti mismo, esa es la rosa mística que nunca fenece delante del espejo. 


 

domingo, 28 de febrero de 2021


Una llave rota es solo una frustración que debe ser olvidada. Esa puerta está cerrada pero hay cientos de llaves capaces de abrirla. Entonces, volverá la vida como siempre a pasearse por el umbral de mi casa. 

 

miércoles, 18 de noviembre de 2020



Sobran las palabras sino no se acciona la reflexión. Vivimos la polarización de las ideas extremas, buscando soluciones sin medidas, cuando el dolor que nos acecha es un sistema que nos esclaviza y manipula. Sufrimos todos y todas, las consecuencias de la especulación, el poder y la explotación desmedida de cualquier fuente de energía que sustenta esta sociedad tan injusta. Gastan recursos ajenos en beneficio de una parte de la humanidad para su bienestar, mientras otros y otras huyen de sus territorios buscando mejores oportunidades. Adolece el mundo, llora lágrimas negras, inflamadas con el fuego del odio y la ignorancia, sin prestarse a concebir que el mal que aqueja a esta humanidad, esta generada por malhadadas estrategias de  poder. Te animo a conocer el quebranto ajeno pues es el mismo que nos atañe, te invito a ponerte su máscara y veas a través de sus ojos: la desigualdad, las guerras, la desolación, la masacre, los ecosistemas destruidos, el mar de plástico, las vidas cercenadas y ahogadas en un océano de incertidumbres. El tiempo es oro, el peor enemigo del hombre es el hombre y vivimos en una felicidad abstraída por el dinero. Piensa que el futuro está en nuestras manos, cambiando la manera de ver y sentir nuestro mundo, sostenlo un instante, quiérelo, haz que la vida del mañana sea mejor para las siguientes generaciones.


viernes, 4 de septiembre de 2020

Quisiera ser naturaleza vegetal, sin tener que estar asfixiado por las preocupaciones pero el hombre hasta en eso, lo destruye todo en detrimento de sí mismo. Me gustaría no sentir tanto dolor, tanta y tanta desesperación, tanta y tanta impudicia, tanto odio, tanta deshumanización. Ojalá me atrapara la naturaleza entre sus brazos, como detritus para una nueva tierra fértil, sin que los pasos del hombre sigan arrasando todo lo que su ambición pisa y denigra. A veces, pienso que este virus debería llevarse la vida de los infames, los predicadores de la adversidad y los hambrientos de poder. Sin embargo, la mano divina del hacedor no es sino una entelequia y son otras manos, manos de sombras, las que detentan el caos y la muerte. Ahora que nos mantienen enmudecidos bajo la naturaleza oscura y devastadora del hombre, solo nos queda esperar que nos aten a un futuro adscrito al yugo de lo conmensurable, al control de una vidas determinadas por el miedo. Hemos descubierto la naturaleza de parte de la humanidad irracional, ignorante, mímesis de una sombra que parecía dormida. Entonces ¿qué nos queda por hacer? Yo me abrazo a mi naturaleza humana, a los bosques, a la selva, al alma del mundo……